Esta es una historia verídica, que le podría suceder a cualquiera de ustedes, ya que han entrado… a la dimensión DOMINICANA...
Luis es un muchacho normal y corriente (quizás demasiado corriente). Estudia, se quema, coje conchos, comparte con sus amigos, tiene un perro viralata y hace cualquier otra cosa que se supone hace un joven normal. Pero el destino guarda muchas cosas en la manga, a veces es dinero, otras veces una fruta pero en el día de hoy lo que trae escondido es algo mas siniestro algo digno de la dimensión D.
Aun no entiendo que sucedió, en verdad puedo asegurar que nunca lo entenderé.
Mientras esperaba un vehiculo de la ruta M sentí como que algo o alguien me observaba así que mire rápidamente sobre mi hombro tan solo para descubrir que me encontraba totalmente solo.
Aquella sensación me acompaño por el resto de la mañana.
Mientras pagaba la uni, mientras me fijaba en &%*·” (jajaja si creían que pensaba escribir la materia), mientras caminaba por una calle oscura en una escena a blanco y negro, mientras me añugaba con un frito en Cerdo centro… en fin siempre se mantuvo, en cada momento, en cada lugar el peso de unos ojos asechantes…así que me dirigí a mi casa, pero al entrar a mi edificio de apartamentos sentí que la sensación se hizo aun mayor, casi palpable y no pude soportar más aquel sentir paranoico, por lo que me detuve quedando en total silencio e inmóvil hasta que en un justo momento me volví violentamente y grite:
-¡¡¡ya basta!!!-tan solo para encontrarme frente a frente con… la mujer del mantenimiento la cual grito con furia ante tal sobresalto:
- Mira a ver azaroso si tu coje otro sitio pa´ ir a joder coño. Eto no e lugar pa que tu te asutando a uno vorrrtiandote de gorrpe!.
A lo que respondí:
- Hay perdón doña es que yo creía…
- Tu siempre ta creyendo, sieeeempre creyendo ve a ver y ame er favol y quistateme der frente.!.
- Esta bien pero disculpe – grite mientras corría pisos arriba hasta mi apartamento (Escapando de un posible golpe con una escoba), y aun podía escuchar a la señora que decía:
- Ese mardito loco de mierd$%... me tiene jarta!!!.
¿Que es todo esto?, ¿tan solo un ataque de paranoia?, ¿acaso estaba perdiendo la razón?. ¿Por que persistía esa extraña idea en donde un par de ojos se centraban en mi persona, incluso estando en la total soledad de mi habitación, donde apenas podía ver el movimiento hecho por mi reflejo en el espejo?.
¡¡¡El espejo!!!. Me acerque a el. Con calma mientras aquella imagen se dirigía hacia mi y con aquella misma tranquilidad pero ahora con algo de miedo levante mi mano derecha y lentamente le acerque hacia los ojos en el cristal , lentamente, lentamente hasta que una voz dijo:
- ¿Qué va a hacer hermano? ¿Me va a joder el ojo?-